El año 1764 el imperio ruso emprendió una nueva expedición, impulsada por Catalina II, cuyo objetivo era comercial, para lo cual se creó la Compañía de Kamchatka formada por comerciantes rusos que tenían experiencia de negocio en Siberia y en las fronteras de China. En realidad, la zarina Catalina II de Rusia emitió una ukaz ordenando una expedición naval secreta para explorar la zona que separa Asia y América. Se establecieron en tres factorías: en Ojotsk, en Kamchatka y en Kolima. A pesar de los fines comerciales que le movían, la zarina también encargó a sus miembros que tomasen exacta noticia de las islas y de las costas situadas al norte y al nordeste de Kamchatka.
Krenitzin y Levashef, 1768-1769
A cargo de la expedición naval se colocó el capitán Peter Kuzmich Krenitzin, cuyo subdirector era el teniente Miguel Levashef. Partieron de San Petersburgo el 1 de julio de 1764 y llegaron a Okhotsk (Ojotsk) y construyeron dos barcos, reparando otras dos, y con los cuatro zarparon de Ojotskel 10 de octubre de 1766.
La expedición salió ese mismo año rumbo a América desde dos puntos distintos para encontrarse posteriormente en el cabo Tchukestkoy (cabo Chukchi). La primera iba a cargo del capitán Aleksei Chirikov, que salió por el norte desde el río Kolima, en el extremo noreste de Siberia, y la segunda iba a cargo del capitán Levashef (no Lewarchoffo Lewachow) por el mar de Kamchatka. Invernaron en Bolcherestkoy-Ostrog y, al año siguiente, continuaron con su navegación y descubrieron un archipiélago situado entre los grados 56 y 67 de latitud septentrional (1765-1766). En palabras de Malo de Luque, esta fue la primera vez que se sabe con toda autenticidad que se dobló dicho cabo llegando a la bahía de San Pedro y San Pablo. Como resultado de estas expediciones, hubo que cambiar de un modo sustancial el anterior mapa ruso (1758), en lo que se refería a las costas e islas del mar cercano a Anadir (Anádyr, Chukotka, Rusia ) y a las costas de América, situadas enfrente, publicando un nuevo mapa en 1773.
Un antiguo mapa (1773) de Chukotka, que muestra la ruta de la expedición de Dezhniov en 1648. Semión Ivánovich Dezhniov o Dezhnev (ca. 1605–1672) fue un explorador ruso de Siberia que en 1648 lideró una expedición en la que fue el primer europeo que dobló el promontorio más oriental de Asia y navegó a través del estrecho de Bering, descubriendo que Asia no estaba unida por tierra con Alaska. En 1648 navegó desde la boca del río Kolymá, en el océano Ártico, hasta el río Anadyr, en el océano Pacífico. Su hazaña fue olvidada durante casi cien años y Vitus Bering se llevó el crédito por el descubrimiento del estrecho que ahora lleva su nombre.
Entre 1769 y 1774, por orden de la emperatriz Catalina II, un grupo de científicos rusos estuvo explorando las regiones de Rusia y Persia con el objetivo de progresar en materia de Historia Natural, Comercio y Artes.
Todo el comercio de los rusos tanto en América como en los archipiélagos del Norte se realizaba a través de Kamchatka. El gobierno de la península de Kamchatka se dividía en cuatro cuarteles: Bostchereskoy-Ostrog, Miguilskoy, Ostrog bajoy Ostrog alto. El primero era el principal, y tenía una chancillería subordinada a la de Ojotsk, que se ocupaba de los asuntos de justicia en el territorio. Dar salida a las pieles obtenidas no representaba ningún problema, ya que en China pagaban a un precio muy elevado las pieles de castores y de las zorras negras.
La preocupación española: la invasión rusa de América
A medida que las expediciones rusas en el Pacífico Noroeste, tanto en Asia como en América, se hacían más numerosas y rentables, crecía en España la preocupación, en particular, por la posibilidad de que el imperio de los zares saltara el estrecho de Bering para expandirse en Norteamérica, posibilidad harto amenazadora para la tranquilidad de California. Prueba de la inquietud que los progresos rusos despertaban en el gobierno de Madrid son las numerosas cartas e informes a través de las cuales los ministros plenipotenciarios de la Monarquía informaban a la Corte de los progresos rusos y de los riesgos, reales o supuestos, que estos avances podían suponer para las posesiones españolas en Norteamérica.
Carlos III de España
Carlos IIInombró a don Pedro Jiménez de Góngora (1727-1794), marqués de Almodóvar, como ministro plenipotenciario en San Petersburgo con el objetivo de averiguar el estado tanto interno como exterior de aquella Corte y su gobierno. De modo que éste llegó al imperio ruso el 30 de junio de 1761 y estuvo dos años al frente de la misión diplomática, hasta que a finales de julio de 1763 abandonó San Petersburgo, siendo sustituido por Álvaro de Navia Osorio, vizconde de la Herrería. Tras el vizconde de la Herrería, el marqués de Grimaldi, que seguía estimando necesario mantener una buena correspondencia con Rusia, en 1772 trasladó desde Estocolmo a San Petersburgo al conde de Lacy, militar de origen irlandés, que también remitió numerosos informes relativos al Pacífico Noroeste.
Pedro Jiménez de Góngora, Duque de Almodóvar (1727-1794)
En la carta de 1 de octubre de 1761 a la que ya se ha hecho referencia profusa en el primer epígrafe, el marqués de Almodóvar informa sobre el estado de los descubrimientos del imperio. Comienza diciendo que generalmente las expediciones rusas salen desde los puertos de la Península de Kamchatka especialmente del de Avatscha o San Pedro y San Pablo (Petropavlovsken la Bahia de Avayscha).
El gobierno ruso mantenía la máxima discreción sobre el asunto para anticiparse a otras naciones tanto en los descubrimientos como en las ventajas comerciales. Puede ser también que los intereses españoles en el momento se centraran más en saber qué territorios se descubrieron que en los fines comerciales de las expediciones.
Petropávlovsk-Kamchatski. Fuente: Wikipedia
Dos cartas dirigidas al marqués de Grimaldi y escritas por el vizconde de la Herreríaen los años 1767 y 1768 informan de la llegada a tierra firme americana de rusos a través del paso del estrecho de Bering, a pesar de las dificultades con que se encontraban, debido a la brevedad del verano, escribe Manuela Fernández Rodríguez, La presencia rusa en el Pacífico Noroeste, p. 107.
La preocupación española no sólo se observa a través de los informes, sino a través de los hechos. Ante la llegada de tales noticias de San Petersburgo, la corte española tuvo temor por la fragilidad de su frontera septentrional en América en caso de que los rusos la invadieran. En 1767 se ordenó la ocupación del puerto de Monterrey como una medida estratégica para defender el virreinato.
Monterrey. Fuente: CityExtra
Los españoles realizaron varias exploraciones colonizadoras en la Alta California con el objetivo de proteger a las poblaciones del noroeste del virreinato (11). En 1769 partieron dos expediciones marítimas desde Loreto, Baja California, y otras dos de índole terrestre que, al mismo tiempo procedieron a iniciar la fundación de misiones y presidios en aquella región y fortificar las poblaciones fronterizas.
Loreto, Baja California
Baja California
Los rusos y los españoles se preocuparon por proteger y asegurar sus posesiones en América del Norte, no sólo para defenderse unos de otros sino también para evitar que los ingleses y los angloamericanos se vieran tentados por esos territorios. “Los rusos incluso temían, como veremos a continuación una injerencia española en sus territorios” (12). En una carta de 1772, el conde Lacy copia una carta rusa en la que el gobierno de aquel país manifiesta su temor a una invasión de Kamchatka por los españoles, temor que hizo plantearse al gobierno ruso la posibilidad de pedir ayuda a Inglaterra. “La supuesta amenaza hispánica sobre Kamchatka, carecían de todo fundamento real” (13).
Colonias españolas siglo XVIII
En 1773, el conde de Lacyenvía una carta a España informando de que en 1769, un oficial de marina ruso, llamado Eschericow continúo con los viajes desde Kamchatka a América, de donde volvió en 1771 y llegó a la corte a principios de 1772 donde entregó sus papeles y juró que guardaría el secreto de sus descubrimientos. El marinero, al parecer, recogió un puñado de monedas españolas en América (14).
La Exploración de Siberia
19. Los rusos
10. Vitus Bering